lunes, 2 de abril de 2012

Todo lo que siempre quise.

Me habías dicho que no lo creías todavía, que pensabas que estas cosas le pasaban a los otros y no a vos, que no habías caído que habías encontrado a alguien tan especial.... bueno, yo digo lo mismo, porque creo haber encontrado lo que estaba buscando hace bastante.


Te encontré hace poco, realmente. Empezamos a hablar y nos caímos demasiado bien... demasiado. Teníamos gustos similares y concordábamos en todo. Hablamos poco y ya habíamos pactado vernos. Los dos sabíamos que iba a ser especial. Recuerdo estar nervioso, pero no tanto como vos. Lo estabas, y mucho, con eso me di cuenta que realmente eras sincero y no eras como todas las personas que había conocido anteriormente. Me cocinaste, miramos Dr. House y comimos helado. La noche se tornaba en una noche oficialmente especial. Hasta que pasó, y fui yo quien tomó la iniciativa, cosa que no había hecho antes. Porque pareciera que todavía no maduraste, que quedaste en tus años de secundaria siendo el típico chico tímido que le tiene miedo al mundo. Quizás eso es lo que me gusta de vos, que al no conocer el mundo, sigas siendo inocente. Y realmente me encanta esa parte de vos. Todavía no creo todo esto, lo estoy procesando aún. Pero si realmente esto sigue así, me encantaría seguir adelante... y con mucho gusto.
Pensé que alguien como vos iba a llegar a mi vida, pero no ahora. Pensé que iba a tardar muchos años, cuando yo algún día sea una persona madura y tenga claras mis cosas, pero te encontré y no me arrepiento de nada. 
Sea como sea, vivas lejos o no, quiero más de vos. Porque me haces bien y creo que yo te hago bien a vos. Tus amigos me aceptan y los míos también. No hay nada para dejarlo todo. 


Yo ya aposté todo por vos, ahora solo queda esperar.

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